Con la evolución del concepto de discapacidad hay una nueva forma de ver el retardo mental, que ya no se considera como un rasgo absoluto de la persona, sino como el resultado de la interacción de una persona que tiene unas habilidades y unas capacidades intelectuales limitadas y su ambiente. No es suficiente centrarse en un solo aspecto de la persona, por ejemplo su coeficiente intelectual (C.I), sino que es fundamental hacer una descripción de sus habilidades y limitaciones a nivel de conductas adaptativas que son básicas en su funcionamiento cotidiano.
Las discapacidades mentales afectan tanto las actividades motoras como las mentales de una persona y entre ellas están: el Síndrome de Down, la Felilcetonuria, el Síndrome de West o el Síndrome de X-frágil.
Como complemento a las enfermedades que aquí se pueden consultar se facilita el acceso al Informe del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales "Modelo de atención a las personas con enfermedad mental grave". Este informe ha sido redactado por un grupo de trabajo coordinado por la Federación Española de Asociaciones de Rehabilitación Psicosocial (FEARP) y las siguientes entidades participantes: Asociación Española de Neuropsiquiatría (AEN), Confederación Española de Agrupaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental (FEAFES), Hermanas Hospitalarias; y representantes del IMSERSO.
Se pretende facilitar a la comunidad de profesionales y agentes que intervienen en el diseño de políticas y la prestación de servicios a las personas con enfermedad mental grave un instrumento importante para alcanzar modelos de atención normalizados en el conjunto del Estado.