Criterios de definición
Se trata de una enfermedad crónica caracterizada por la existencia de niveles elevados de glucosa (azúcar) en sangre por una alteración en la secreción y/o acción de la insulina. Se ve afectado también el metabolismo del resto de los hidratos de carbono, lípidos y proteínas.La importancia reside en su frecuencia y en las complicaciones crónicas que produce, siendo una de las principales causas de invalidez y mortalidad prematura en la mayoría de los países desarrollados.
Las cifras normales de glucemia son entre 80-110 mg/dl. Se establece el diagnostico de Diabetes cuando la glucemia en ayunas está por encima de 126 mg/dl.
Entre 110 y 126 mg/dl se considera que el paciente tiene una intolerancia a la glucosa. Pero siempre debe confirmarse el diagnostico con una segunda analítica.
Cualquier valor debe confirmarse con una segunda determinación, excepto si la glucemia está por encima de 200 mg/dl y el paciente tiene síntomas claros de diabetes.
La diabetes es un importante factor de riesgo de cardiopatía isquémica e ictus. Las tasa de estas enfermedades son 2-4 veces mayores en los diabéticos que en los no diabéticos.
Además existen otra serie de complicaciones importantes asociadas a la diabetes, como por ejemplo alteraciones de la visión, alteraciones de la circulación y alteraciones de la funcionalidad de los riñones. Por todo ello es importante no solo el diagnóstico precoz de la diabetes, sino también un control médico y de estilo de vida adecuado una vez diagnosticada.
El porcentaje de diabetes mellitus diagnosticada en personas adultas es alrededor del 6 % en Espàña y ha aumentado en las últimas décadas . El porcentaje real estimado de la población española está en torno al 10,5. Es decir que existe aproximadamente un 4% de la población que tiene diabetes mellitus sin ser consciente de ello. Como hemos comentado anteriormente, estas personas son las pueden estar en mayor riesgo de sufrir las complicaciones cardiovasculares u de otro tipo asociadas a esta enfermedad. Por lo que es imprescindible sensibilizar a la población para que se realice análisis periódicamente.
Prevención primaria
Los factores más importantes son los asociados a una combinación de cambios de estilo de vida: evitar el sobrepeso, aumentar la actividad física y reducir la ingesta de sal y alcohol. El incremento actual en la prevalencia de esta enfermedad, sobre todo la conocida como Tipo II, es decir la que no precisa de insulina para su tratamiento, se ascia además de al envejecimiento de la población, a los cambios producidos en cuanto a alimentación y sedentarismo en nuestra sociedades.
Recomendaciones
A partir de los 35 años se aconseja practicar una analítica cada 5 años , excepto en la población con antecedentes familiares en primer grado y con otros factores de riesgo como obesidad, hipertensión , dislipemia y antecedentes de diabetes gestacional en los que que el control debe ser más frecuente y es su médico de familia quien le indicará la frecuencia con que debe realizarse analítica.