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Temblores Seniles

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  2. https://www.discapnet.es/temblores-seniles Temblores Seniles
Luis Maita
 | Publicación: 5 Junio 2023 | Última actualización: 9 Agosto 2023

Los temblores seniles, también conocidos como temblores benignos o temblores esenciales, son un trastorno neurológico común que afecta a personas mayores. Estos temblores se caracterizan por movimientos involuntarios y rítmicos de las manos, los brazos, la cabeza o incluso la voz. En este artículo, exploraremos en detalle qué son los temblores seniles, su clasificación, diagnósticos diferenciales y las opciones de tratamiento disponibles. Además, proporcionaremos consejos prácticos para lidiar con los temblores en la vida diaria.

Definición

El temblor es la oscilación rítmica e incoercible de alguna parte del cuerpo debida a la contracción alternante involuntaria de los músculos implicados. Cuando se presentan en las personas mayores, los conocemos como temblores seniles. Existen diferentes tipos de temblor, y diferentes causas que pueden llevar a ellos; pero, por lo general, el tipo de temblor puede orientar sobre su origen. Puede resultar de procesos fisiológicos o patológicos, y afecta con mayor frecuencia a manos, cabeza, piernas y voz.

Clasificación

El temblor puede ser solo un síntoma más dentro de una enfermedad más compleja, o bien constituir en sí una enfermedad como único síntoma.

Temblores causados por enfermedades

Entre las enfermedades que se acompañan de temblor o temblores seniles, quizás la más conocida sea la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, existen multitud de cuadros que cuentan al temblor entre sus síntomas, como los problemas vasculares o de otro tipo, localizados en el sistema nervioso central y concretamente en el cerebelo, siendo en estos casos el temblor de tipo atáxico.

Otras estructuras cerebrales que al dañarse pueden producir temblor son: el tronco del encéfalo, el mesencéfalo o algunos núcleos neuronales específicos como el núcleo rojo (temblor rúbrico).

Temblores causados por medicamentos

Por otro lado, es importante señalar que muchas veces los temblores seniles son un efecto secundario de una larga lista de medicamentos. Las fenotiazinas ocupan un lugar destacable en esta lista, son unos fármacos que se recetan a menudo para tratar enfermedades de origen psíquico, así como para el tratamiento sintomático de cuadros de vómitos o vértigos.

Otros medicamentos usados para el tratamiento de enfermedades psíquicas como el haloperidol o algunos también muy conocidos como la cinarízina, que se usa para mejorar la «circulación cerebral», o también como antivertiginoso, pueden ser causantes de los temblores.

Esto no debe preocupamos si tomamos alguno de estos medicamentos, pues en general, el temblor desaparece al abandonar la medicación. Lo importante es tener en cuenta que un temblor puede estar causado por un medicamento, que a lo mejor se toma desde hace mucho tiempo, para no atribuir este temblor a otras causas, complicando así el diagnóstico y el tratamiento del mismo.

Otros tipos de temblores

No obstante, hay varios tipos de temblores seniles, el tipo más frecuente de temblor sintomático es el temblor esencial benigno o familiar, cuya característica principal es precisamente que su único síntoma es el temblor.

Otras formas de temblor aislado, son el temblor fisiológico, en el que este no supone una limitación relevante en la actividad del que lo padece, y su variante, el temblor fisiológico exacerbado, que suele darse en situaciones como el hipertiroidismo, la ansiedad, o el síndrome de abstinencia del alcohol, por poner algunos ejemplos.

Diagnóstico diferencial

Aparte de las diferentes técnicas para diagnosticar cada situación específica de los temblores seniles, el primer paso para diferenciar los diferentes cuadros que originan temblor es definir adecuadamente el tipo de temblor presente, según sus características clínicas. Podemos clasificar los temblores según su forma de aparición o según su frecuencia.

Según su aparición, los temblores seniles se clasifican en dos grupos:

Temblor de reposo 

En estos casos el temblor aumenta cuando la parte afectada se halla en reposo, por ejemplo, cuando las manos están apoyadas sobre el regazo. Este temblor disminuye algo cuando el paciente realiza alguna actividad con las manos, aunque también puede disminuir si se alcanzan grados intensos de relajación.

Este tipo de temblor es característico de la enfermedad de Parkinson y los llamados síndromes parkinsonianos, y puede ser también el efecto secundario de algunos fármacos.

Temblor de acción

Se produce tras la contracción voluntaria de los músculos. Este tipo puede subdividirse en dos:

  • El temblor cinético: en estos casos el temblor alcanza su máxima intensidad cuando se lleva a cabo alguna acción, sobre todo si es una acción precisa. Se denomina temblor atáxico y se pone de manifiesto por diferentes maniobras exploratorias como la del dedo-nariz, y que no es ni más ni menos que llevarse la punta del dedo índice a la punta de la nariz. Es un temblor de gran amplitud.
  • Temblor postural: Este grupo se caracteriza por aumentar al mantener una postura fija, como puede ser el permanecer con las manos estiradas o aguantar una taza de café. Este tipo de temblor es el que aparece como consecuencia de una situación de ansiedad, un hipertiroidismo, o esta enfermedad que hemos llamado temblor esencial benigno; aunque también puede aparecer en la enfermedad de Parkinson.

En realidad, el temblor postural, entre los que se halla el temblor fisiológico o temblor normal, también puede aumentar con las acciones precisas, la costurera al enhebrar sus primeras agujas, por ejemplo. Pero nunca estos temblores normales, ni tampoco los debidos al temblor esencial benigno, que también pueden aumentar con las acciones, alcanzan las grandes oscilaciones que se ven en el temblor atáxico. Este tipo de temblor es propio de enfermedades localizadas en el cerebelo.

Según su frecuencia:

  • 2,5 – 4 Hz: característico de temblores de origen cerebeloso o por disfunción troncoencefálica.
  • 4 – 4,5 Hz: se da en el temblor postural de la enfermedad de Parkinson o en temblores rúbricos o mesencefálicos.
  • 4,5 – 7,5 Hz: en el temblor esencial o el temblor postural del Parkinson.
  • 8 – 12 Hz: el temblor fisiológico o el fisiológico exacerbado.

Temblor Senil

Los temblores seniles no son más que el debut de un Temblor Esencial en la senectud y tiene una incidencia superior al 10% en la población mayor de 70 años. Es uno de los desórdenes neurológicos más comunes del adulto, y es 20 veces más común que la Enfermedad de Parkinson. Se caracteriza por aparecer en determinadas posturas o asociado a movimientos, y compromete las extremidades, los labios, el mentón, la lengua, las cuerdas vocales y la cabeza.

Aunque tiene una evolución progresiva, y se mantiene durante toda la vida, solo limita el autovalidismo en sus fases avanzadas. Aproximadamente el 40% de los pacientes tienen antecedentes familiares de temblor.

La edad de inicio tiene una distribución bimodal del temblor esencial, con una edad media de aparición de 15 años, pero con mayor frecuencia puede ser manifestada en la edad adulta y adultez mayor; la sintomatología se torna importante e incluso limitante en la segunda década de la vida y se incrementa con la edad. No hay diferencia de sexo.

Las extremidades superiores se afectan precozmente, usualmente de forma asimétrica; y pueden diseminarse y afectar las piernas, cabeza, músculos faciales, voz y lengua. Alrededor del 50% de los afectados reducen temporalmente el temblor con la ingesta de alcohol. Algunas situaciones pueden exacerbar el temblor, como el estrés, la ansiedad o la fatiga.

Para el diagnóstico de los temblores seniles es fundamental descartar cualquier otra causa que origine el temblor, y este debe ser de duración prolongada (mayor de 5 años).

Tratamiento

El temblor esencial, sobre todo en su variedad senil o temblores seniles, se puede manejar con bastantes posibilidades de éxito con los siguientes recursos:

  • En primer lugar, se debe hacer psicoterapia al paciente, dándole un trato amable sin menospreciar sus síntomas e induciendo a sus familiares a seguir la misma conducta y mostrar tolerancia a las consecuencias del temblor. Asimismo, es importante explicarle que el temblor es toda la enfermedad, que no lo conducirá a otra enfermedad y que no desembocará en incapacidad grave.
  • Terapia física: La terapia física puede ayudar a mejorar la fuerza muscular y la coordinación, lo cual puede reducir la intensidad de los temblores.
  • Bloqueantes beta-adrenérgicos: El propanolol es la droga con la que existe mayor experiencia. Se debe tener en cuenta que sus efectos colaterales aumentan con la dosis y que están contraindicados en el EPOC, insuficiencia cardíaca y bradiarritmias cardíacas. Las tomas son de tres a cuatro veces al día, salvo los preparados retard que se puede administrar una a dos veces por día.
  • Primidona: al metabolizarse en el organismo origina fenobarbital y algún otro compuesto activo que lo hacen más efectivo que el barbitúrico. Con frecuencia produce náuseas o vómitos y ataxia, por lo que se debe usar dosis menores que en la epilepsia. Para evitar sumación de efectos depresores sobre el encéfalo, al indicar este medicamento, es conveniente suprimir el fenobarbital.
  • Sedación: Cualquier tranquilizante menor es útil, pero como el fenobarbital posee, además, una acción específica sobre el temblor mismo, se lo puede indicar en primer lugar respecto de los demás. Otras alternativas son el midazolam y la mirtazapina.
  • Estimulación cerebral profunda (DBS, por sus siglas en inglés): Para aquellos con temblores graves y persistentes que no responden a otras formas de tratamiento, la DBS puede ser una opción. Consiste en la implantación de electrodos en áreas específicas del cerebro que controlan los movimientos, los cuales son estimulados por medio de un dispositivo similar a un marcapasos.
  • Cirugía: En casos extremos y cuando otros tratamientos no han sido efectivos, se pueden considerar opciones quirúrgicas como la talamotomía, que consiste en la destrucción de una pequeña porción del cerebro para reducir los temblores.

Es importante consultar a un médico especialista en neurología para evaluar el tipo y la gravedad del temblor y determinar el mejor enfoque de tratamiento en cada caso específico. Cada persona es única y los tratamientos pueden variar según las circunstancias individuales.

Consejos prácticos para lidiar con los temblores en la vida diaria

  1. Mantén un estilo de vida saludable: Una alimentación balanceada y la práctica regular de ejercicio pueden ayudar a reducir la intensidad de los temblores. Evita el consumo excesivo de cafeína, alcohol y tabaco, ya que pueden empeorar los temblores.
  2. Prueba técnicas de relajación: La ansiedad y el estrés pueden empeorar los temblores. Intenta practicar técnicas de relajación como la respiración profunda, la meditación o el yoga para reducir la tensión y mejorar el control de los temblores.
  3. Utiliza utensilios adaptados: Si los temblores afectan tu capacidad para realizar tareas cotidianas como comer o escribir, puedes buscar utensilios adaptados como cubiertos con agarre ergonómico o bolígrafos antideslizantes para facilitar estas actividades.
  4. Organiza tu entorno: Asegúrate de que tu entorno esté libre de obstáculos para evitar caídas accidentales. Organiza tus pertenencias de manera que sea más fácil alcanzarlas y evitar golpear objetos cercanos.
  5. Aprende técnicas de compensación: Puedes aprender técnicas que te ayuden a compensar los temblores, como usar ambas manos para estabilizar objetos, apoyarte en superficies estables o utilizar apoyos para mantener la estabilidad.
  6. Busca apoyo emocional: Hablar sobre tus temblores con amigos, familiares u otros afectados puede ser útil para sentirte comprendido y recibir apoyo emocional. También puedes considerar unirte a grupos de apoyo donde puedas compartir tus experiencias y obtener consejos de personas que están pasando por situaciones similares.

Tipo de enfermedad: 

Enfermedades Discapacitantes

¿Cómo citar este artículo? +

  • Autor(es): Luis Maita, Obra: Temblores Seniles, Publicación: 5 Junio 2023 , Última actualización: 9 Agosto 2023 , Lugar de publicación: Madrid, URL: https://www.discapnet.es/temblores-seniles

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