El cáncer de colon, una enfermedad que se origina en el intestino grueso, conocido como colon, es un tema de preocupación para muchas personas. Este tipo de cáncer, aunque más común en adultos mayores, puede afectar a cualquier edad.
Su inicio, en la mayoría de los casos, está relacionado con la formación de pólipos benignos en el interior del colon, que con el tiempo pueden evolucionar hacia un cáncer de colon de mayor gravedad.
Para prevenir esta enfermedad, se recomiendan pruebas de detección regulares que permitan la identificación y extirpación de estos pólipos antes de que se transformen en cáncer.
En caso de que se diagnostique un cáncer de colon, existen numerosos tratamientos disponibles, que incluyen cirugía, radioterapia y tratamientos farmacológicos como la quimioterapia, la terapia con diana específica y la inmunoterapia.
Síntomas
Los síntomas del cáncer de colon pueden variar según el tamaño y la ubicación del cáncer en el intestino grueso. Los signos más frecuentes son:
- Cambio persistente en los hábitos intestinales: diarrea, estreñimiento o un cambio en la consistencia de las heces.
- Sangrado rectal: sangre roja brillante o sangre en las heces.
- Molestia abdominal persistente: calambres, gases o dolor.
- Sensación de que el intestino no se vacía completamente.
- Debilidad o fatiga.
- Pérdida de peso sin causa aparente.
Es importante señalar que en las primeras etapas de la enfermedad, muchas personas con cáncer de colon no experimentan síntomas.
Cuando consultar al médico
Si experimentas cualquiera de estos síntomas de manera persistente, es fundamental que solicites una cita con un médico.
La detección temprana del cáncer de colon puede aumentar significativamente las posibilidades de un tratamiento efectivo.
Causas
Aun los médicos no han identificado con precisión la causa exacta de la mayoría de los casos de cáncer de colon, en términos generales, se cree que comienza cuando las células sanas del colon experimentan mutaciones en su ADN.
El ADN es como un libro de instrucciones para las células, y cuando este se daña, las células comienzan a dividirse de manera descontrolada, incluso cuando no se necesitan más células.
Con el tiempo, estas células cancerosas pueden acumularse y formar tumores que invaden y destruyen el tejido circundante. Además, las células cancerosas pueden migrar a otras partes del cuerpo, un proceso conocido como metástasis.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo del cáncer de colon se pueden clasificar en dos grandes grupos:
- Factores inmodificables:
- Edad: El riesgo aumenta con la edad.
- Raza: Las personas de raza afroamericana tienen un mayor riesgo.
- Antecedentes familiares: Si tienes familiares que han padecido la enfermedad, tu riesgo aumenta.
- Antecedentes personales: Si has tenido cáncer colorrectal o pólipos no cancerosos en el colon, tu riesgo aumenta.
- Síndromes hereditarios: La poliposis adenomatosa familiar y el síndrome de Lynch son dos síndromes hereditarios que aumentan significativamente el riesgo de cáncer de colon.
- Factores modificables:
- Dieta: Una dieta rica en grasas y carnes procesadas, y pobre en frutas, verduras y fibra, puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
- Sedentarismo: El sedentarismo puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
- Diabetes: La diabetes puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
- Obesidad: La obesidad puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
- Tabaquismo: El tabaquismo puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
- Consumo excesivo de alcohol: El consumo excesivo de alcohol puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
- Radioterapia abdominal previa: La radioterapia abdominal previa puede aumentar el riesgo de cáncer de colon.
Es importante tener en cuenta que la presencia de uno o más factores de riesgo no significa que una persona vaya a desarrollar cáncer de colon.
Sin embargo, es importante estar al tanto de estos factores y tomar medidas para reducir el riesgo, como llevar una dieta saludable, hacer ejercicio con regularidad y no fumar.
Prevención
En el caso de personas con un alto riesgo de cáncer de colon, se ha investigado el uso de medicamentos preventivos como la aspirina, que podrían reducir el riesgo de pólipos y cáncer de colon. Sin embargo, estas opciones se reservan para casos específicos y se deben hablar con un médico.
Exámenes de detección del cáncer colorrectal
La prevención del cáncer de colon es fundamental, y existen medidas que puedes tomar para reducir tu riesgo.
Una de las principales recomendaciones es someterse a exámenes de detección de manera regular.
Para las personas con riesgo promedio, se sugiere considerar un examen de detección alrededor de los 45 años. Sin embargo, si tienes un mayor riesgo debido a antecedentes familiares, es aconsejable hablar con tu médico para determinar la edad adecuada para realizar dichas pruebas.
Cómo reducir el riesgo de cáncer colorrectal
A continuación, te comparto ocho factores imprescindibles para proteger tu salud.
1. Mantén un peso saludable
La obesidad y el sobrepeso son factores de riesgo importantes para el cáncer colorrectal.
Si tienes sobrepeso u obesidad, hablar con un nutricionista puede ayudarte a desarrollar un plan para perder peso de forma saludable.
2. Incluye verduras y frutas en tu dieta
Una dieta rica en frutas y verduras es una excelente manera de reducir el riesgo de cáncer colorrectal.
Las frutas y verduras son ricas en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes, que pueden ayudar a proteger el colon de daños.
3. Moderación en el consumo de alcohol
El consumo excesivo de alcohol puede aumentar el riesgo de cáncer colorrectal.
Si optas por beber, limita tu consumo a una porción al día.
4. Una dieta rica en fibra
La fibra aporta numerosos beneficios para la salud, como regularidad en los movimientos intestinales, promoción de la salud intestinal y control del peso al proporcionar una sensación de saciedad.
Además, algunos estudios indican que una ingesta adecuada de fibra se relaciona con un menor riesgo de cáncer colorrectal.
5. Evita las carnes procesadas
Las investigaciones han demostrado de manera consistente que el consumo excesivo de carne procesada aumenta el riesgo de cáncer colorrectal.
De hecho, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) ha clasificado la carne procesada como "cancerígena", lo que significa que tiene el potencial de causar cáncer.
Esta categoría abarca productos como embutidos, tocino y salchichas, incluso si son orgánicos o no contienen nitratos.
6. Limita el consumo de carne roja
Además de la carne procesada, la carne roja en general se asocia con un mayor riesgo de cáncer colorrectal.
No solo se trata de carne de res, sino que también incluye carne de cerdo, bisonte y venado.
Para reducir este riesgo, es aconsejable optar por proteínas animales magras, como pollo o pescado, o alternativas de origen vegetal, como judías, lentejas, tofu, quinoa y garbanzos.
Infórmate más en nuestro artículo sobre: Las mejores fuentes de proteína magra y sus beneficios.
7. Incorpora actividad física en tu rutina diaria
La evidencia médica respalda la idea de que el ejercicio contribuye a reducir el riesgo de diversos tipos de cáncer, incluido el cáncer colorrectal.
Se recomienda realizar al menos 30 minutos de actividad física al día, cinco días a la semana.
8. Di adiós al tabaco
No puedo concluir sin mencionar la importancia de dejar de fumar. Este es otro paso crucial para reducir el riesgo de cáncer colorrectal, y tu médico puede ser un aliado invaluable en tu camino hacia un estilo de vida libre de tabaco.
Hay estrategias efectivas que pueden ayudarte a superar la adicción al tabaco y mejorar tu salud en general.
Bibliografía
Gupta R, Bhatt LK, Johnston TP, Prabhavalkar KS, 2019, Colon cancer stem cells: Potential target for the treatment of colorectal cancer, Cancer Biol Ther, 10.1080/15384047.2019.1599660, https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31050577/
Fabregas JC, Ramnaraign B, George TJ, 2022, Clinical Updates for Colon Cancer Care in 2022, Clin Colorectal Cancer, 10.1016/j.clcc.2022.05.006, https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/35729033/